Según los expertos se les implantará una serie de sistemas microelectromecánicos: receptor, controlador, batería y conexiones con electrodos, que permitirán guiar al insecto de forma inalámbrica. Se enviarán impulsos eléctricos a su ‘cerebro’ y alas para que se eleve, gire o detenga.
Su sistema permitirá recabar las condiciones ambientales requeridas y enviar o intercambiar información.
Además, Michel Maharbiz, profesor de la universidad de Berkeley, Estados Unidos, explica que se diseñarán para aprovechar su tamaño y penetrar sin ser descubiertos o atravesar pequeñas fisuras o escombros en terreno enemigo. Equipados con sensores de calor, podrán localizar superviviente heridos bajo las ruinas de un temblor o contabilizar el número de fuerzas enemigas.
Los modelos más sofisticados no serán llamados ‘insectos’ si no ‘maquinas biológicas’, tan precisas que serán capaces de modificar su estructura para autorrepararse.
Y tú que piensas ¿crees que es una buena idea?